Sor Ângela nació el 13/05/1927, en la Parroquia de Santa María do Souto, Municipio de Guimarães, Distrito y Diócesis de Braga. Sus padres fueron António da Costa y Otelinda Lopes. Fue bautizada en la Iglesia Parroquial de Santa María do Souto el 20/05/1927 y vivió en esta tierra hasta su ingreso en la Congregación. Ingresó el 01/05/1953 en la Comunidad de Braga.
El Postulantado lo comenzó el 02/02/1953; el Noviciado el 22/08/1953; Primera Profesión el 06/01/1956; Profesión Perpetua el 01/06/1962 en la Comunidad de Braga, siendo Superiora Madre Angelina y compañeras, las Hermanas: Nascimento, Teresinha Araújo, Angélica y Rosário (Eulália).
Celebró las BODAS DE PLATA el 01/06/1981 en la Comunidad de Oporto y las BODAS DE ORO el 01/06/2006 en la Comunidad de Braga.
Como novicia de 2º año, Sor Ângela va a la Comunidad de Oporto con la tarea de acompañar a las internas. Después de la Primera Profesión y la Profesión Perpetua, pasó sus años en las Comunidades de Oporto, Lisboa y Braga, cuidando de las internas y cosiendo, que era su fuerte. En la Comunidad de Porto, estudió y completó el 12º año de escolaridad. Estudió entre 1956 y 1973.
Después de la muerte de Madre Angelina el 12/10/1977 en la Comunidad de Oporto, Sor Ángela es nombrada Superiora pero, con las demás Hermanas, continúa apoyando a los alumnos internos, algunos de ellos universitarios, y dando catequesis en la Parroquia de Cedofeita.
En 1983, Sor Ângela fue enviada como misionera a Angola, sirviendo en las comunidades de Cristo Rey y Catete. También estuvo en la Comunidad Madre de Dios del barrio Ingombotas, donde ocupó el cargo de Superiora. Posteriormente, pasó a Lubango, Comunidad de Santa Teresinha, donde dio un gran apoyo a la Comunidad, sobre todo, en la costura y en el testimonio de vida sacrificada.
Fue una religiosa abierta, dispuesta a ayudar a las personas necesitadas, ejemplo de entrega silenciosa y humilde, trabajadora incansable y buena consejera en todos los sentidos. En 2003, dejó Angola y se unió a la comunidad de Braga.
En esta comunidad, sor Ângela se dedicaba por completo a los trabajos de costura y brinda su apoyo para arreglar el refectorio y la vajilla de la cocina. Ella también estaba siempre lista para reemplazar a cualquier Hermana en el servicio de portería y otros trabajos necesarios y propios de nuestra vida. Era una Hermana muy ferviente, amante de la adoración, sencilla y siempre disponible para hacer el bien a todos.
Sor Ângela, ya muy desgastada y con fuertes dificultades óseo-musculares y auditivas, fue ingresada en la Comunidad de Hermanas Ancianas de Fátima el 24/07/2014, donde vivía frágil, pero muy fervorosa. Falleció el 3 de agosto de 2022.